" ORIENTACIONES EDUCATIVAS "
Buenas, como podemos ver, en la actualidad, el trato de la familia con los hijos debe ser abierto, flexible y sobre todo constante. Con ello, les ayudaremos a los hijos a desenvolverse en un mejor ámbito relacionado con la enseñanza- aprendizaje y bienestar social. Esto se llevará a cabo mediante enseñanza de conductas a los hijos a través de los padres, por ello, os adjunto una serie de orientaciones educativas.
Los padres representan la fuente de seguridad para sus hijos, el modelo a seguir, la base sobre la que ellos construyen su identidad en función de cómo se sienten mirados, tratados y valorados.
El ambiente familiar ejerce una influencia determinante en el niño. Como padres podemos contribuir a mejorar su evolución adoptando actitudes positivas hacia los hijos y poniendo en práctica actuaciones que faciliten la convivencia familiar. Hay que tener en cuenta que para su bienestar los niños requieren las dosis adecuadas de cariño, cuidado y disciplina.
Algunas recomendaciones para lograr autoridad positiva y un buen clima en el hogar.
* Rodear al niño de un entorno afectivo, disciplinado, sereno y estructurado, con unas normas claras y definidas, de modo que el niño sepa que es exactamente lo que se espera de el. Si el entorno es estresante, las normas cambiantes, si los gritos son frecuentes, el niño se siente inseguro.
* Una exigencia adaptada a sus posibilidades. No podemos exigir o abordar mucho.
* Los niños aprenden mas de lo que ven que de lo que decimos. Si no hay coherencia entre nuestras palabras y nuestros hechos, no tendremos autoridad moral.
* Es fundamental la unidad de criterios entre ambos progenitores. Uno y otro deben apoyarse y ser respetuosos con las decisiones tomadas y nunca desautorizar a la pareja delante del niño.
* Los límites deben ser puestos en el momento adecuado, no cuando los padres estemos partos y hayamos perdido el control emocional. A veces, es difícil no perder la calma, es normal cuando se intenta educar día a día, por que lo que deja huella en el niño, es lo que se hace habitualmente.
* Es mejor actuar en lugar de repetir las cosas. Una vez que el niño sabe lo que tiene que hacer y no lo hace, le retiramos consecuentemente la atención para que se de cuenta de su actitud y la corrija.
* Las instrucciones y respuestas verbales de los adultos han de ser breves, precisas y concretas. No vale decir " se bueno" , " portante bien". Hay que dar instrucciones acerca del comportamiento que esperamos de el.
* Alentarle a hacer cosas solos y permitirle tomar pequeñas decisiones. Si se siente independiente en determinadas áreas, es mas probable que acate las normas obligatorias.
* Decir no, solo cuando sea necesario. Si hay demasiados limites el niño no acepta ninguno. Ofrecer alternativas al no y tener presente el si.
* Cumplir siempre las promesas y amenazas. De otro modo, el niño aprende muy pronto que la palabra de los padres no tiene valor.
* Conviene establecer hábitos regulares, es decir, horarios estables de comida, sueño, televisión, hacer las tareas, etc. Si el niño se acostumbra a la misma rutina, la interiorizara mas fácil y la ganara en confianza.
* Es esencial que los adultos adopten un enfoque positivo en sus relaciones con el niño. Son mas aconsejables las referencias positivas a las habilidades y éxitos que logra y el esfuerzo de las conductas positivas contrarias a las que queremos eliminar.
* Ayudarle a reconocer y expresarle verbalmente sus emociones. Cuando esta alterado, los padres debemos hacer de espejo y altavoz poniendo nombre a lo que se siente sin juzgarlo. Así, los niños aprenden que la rabia, los celos, el miedo... Son normales y aceptables, aunque no lo sea determinado comportamiento.
* Enseñarle con nuestra contención a esperar, a calmarse, a reflexionar y hablar de como resolver los problemas. Esto le ayuda a encajar las frustraciones y controlar poco a poco la impulsividad.
* " Educar a un niño es como sostener una pastilla de jabón. Si aprietas mucho sale disparada, si la sujetas con indecisión se te escurre entre los dedos, una presión suave pero firme la mantiene sujeta."
Todas estas recomendaciones pueden ser muy válidas para tener una autoridad positiva y mejorar la convivencia familiar o totalmente ineficaces. Todo depende de dos factores que son absolutamente imprescindibles en la relación con los hijos: amor y sentido común.
No hay comentarios:
Publicar un comentario